Donald Trump se duerme en público y aumentan dudas sobre su salud
El presidente Donald Trump fue recientemente captado con los ojos cerrados durante una reunión de gabinete que se transmitía en vivo. Este incidente ha vuelto a desatar especulaciones sobre su estado de salud, a pesar de las desmentidas oficiales que llegaron desde la Casa Blanca. Las imágenes, donde se lo ve cabeceando, generaron rápido eco en el ámbito político.
La reunión, que duró casi dos horas, reunió a varios jefes de departamento y al vicepresidente JD Vance, quienes se encargaron de exponer logros y celebrar la agenda del presidente. Durante esas intervenciones, las cámaras no pasaron por alto momentos en que Trump se inclinó hacia adelante, se estiró en su silla y cerró los ojos por varios segundos.
Estos episodios recientes llaman la atención en un contexto en el que un artículo de The New York Times había señalado una notable caída en los niveles de energía del mandatario comparado a su primer mandato. Ya en mayo, se le había visto con los ojos cerrados durante una sesión informativa con el príncipe heredero saudí, y también en noviembre, durante un anuncio oficial sobre medicamentos.
Una imagen que muestra señales de desgaste
A pesar de los episodios de somnolencia, la estrategia comunicacional de Trump parece mantener un foco en exhibir energía y resistencia física. Sus largos discursos y su presencia activa en redes sociales buscan proyectar la imagen de un líder incansable. Incluso, quienes lo rodean aseguran que suele enviar mensajes de madrugada y que su ritmo de trabajo es considerado “imparable”.
Sin embargo, un análisis muestra que Trump aparece en público con menos frecuencia en su segundo mandato. Desde el 20 de enero hasta el 25 de noviembre de 2017, protagonizó casi 1700 actos oficiales, mientras que en el mismo período de su segundo mandato, esa cifra se redujo un 39%. Esto incluye también menos actos dentro de Estados Unidos y una agenda más restringida, concentrándose principalmente entre el mediodía y las cinco de la tarde.
En cuanto a su salud, un informe oficial confirmó que Trump ha sido evaluado por hinchazón en las piernas y diagnosticado con insuficiencia venosa crónica. Recientemente, también mencionó haberse hecho una resonancia magnética, aunque no especificó para qué parte de su cuerpo. A pesar de todo, su médico declaró que el presidente tiene una excelente salud cognitiva y física.
Donald Trump prometió revelar los resultados de sus estudios mientras crecen las dudas sobre su salud
En medio de los cuestionamientos sobre su estado, Trump aseguró que está dispuesto a divulgar los resultados de la resonancia magnética que se le realizó en octubre. Dijo no estar seguro de qué parte del cuerpo fue examinada. Este anuncio avivó nuevamente el debate público sobre su condición.
Durante su regreso desde Florida a Washington, declaró a los periodistas que no tiene problemas en compartir los resultados si así lo requieren. Esto se dio poco después de que el gobernador de Minnesota cuestionara su capacidad mental y salud. A sus 79 años, Trump respondió que los resultados fueron “perfectos” y negó que se haya examinado su cerebro, mencionando que pasó un test cognitivo con buenos resultados.